domingo, 3 de enero de 2016

Reencuentro y adiós

Clavabas tus ojos en mi espalda
pensando solamente en puro placer
sin tener en cuenta el dolor causado
sin saber si dejarías marca otra vez.

Y al igual que las horas pasan
tú lo hiciste sobre mi piel.
Dame un poco más de tu tiempo,
vuelve a clavarte en mi sien.

Vuelve, vuelve como las olas
que arrojan nuestros corazones
al inframundo de los sentimientos.
Vuelve pero después márchate.

En verdad ya no te quiero
y no sé si lo volveré a hacer,
por eso te pido que te marches
aunque solo sea por mi bien.

En una misma noche
nuestro reencuentro
se convirtió en despedida.

Fin de la noche, adiós corazón.
Fue un placer volverte a tener
entre la almohada y el colchón.

viernes, 1 de enero de 2016

Diciembre

Diciembre empezaba
entre frío y alegría.
Diciembre comenzaba,
al igual tus sonrisas.
Diciembre alegraba
al igual que haces tú.
Diciembre pasaba
pero sin ti.
Diciembre pensaba,
¿pensarás tú en mí?
Diciembre seguía
pero sin una historia de dos.
Diciembre sentía
como yo, no sé si tú.
Diciembre frío,
caliente el corazón.
Diciembre bebía
de sentimientos encontrados.
Diciembre terminaba
con regalos menos tú.
Diciembre era final,
¿serás principio tú?

sábado, 7 de noviembre de 2015

Pasado y futuro

Subió al bus pensando en todo y en nada a la vez. Eligió rápidamente su sitio, en el que poder estar cómodo y que nadie le molestara. No le apetecía compartir ni unas miseras palabras con nadie pues lo único que necesitaba era meterse en su propia cabeza, dejar de pensar y poder relajarse. El día no había sido precisamente fácil, lleno de discusiones sin sentido, de despedidas formales o emotivas y de un sentimiento de tristeza que le apoderaba cada vez más. Decidía marcharse y sabía que no iba a dar vuelta atrás pues esta ciudad no estaba hecha para él. El bullicio, la soledad entre tanta gente, las largas esperas y el no poder sentirse libre. Pensaba que podía ser libre en una ciudad de tal envergadura como esta pero había sido todo lo contrario pues se sentía preso de esa ciudad y preso de una vida que no le pertenecía, que no era lo que él buscaba. La soledad le abrumaba y sentirse solo es la peor de las sensaciones. Así que decidió cambiarlo todo y subirse a ese bus que podía cambiar el resto.

domingo, 1 de noviembre de 2015

Domingo musical II

Creo que este domingo merece tener una de esas entradas que me gusta hacer muy de vez en cuando...

Este fin de semana ha sido uno de esos fines de semana que me gustaría recordar por mucho tiempo y todo gracias a la música y no por Halloween. He tenido la suerte de poder asistir a dos conciertos increíbles, de los que disfrutas muchísimo, de los que provocan las mejores sensaciones. El primero de la mano de Zahara y el segundo por parte de Vetusta Morla.

viernes, 30 de octubre de 2015

La que intenta ser feliz

Tiene los ojos hinchados de tanto llorar. No siente ya nada. No le quedan lágrimas por derramar. Sus ojos no muestran esa alegría natural que tiene, solo tristeza y desolación. Esos ojos verdes que a más de uno ha enamorado. En ellos solo hay vacío. Un vacío que tal vez una vez alguien llenó pero que en estos momentos se sienten desolados. Ha llorado y se le nota en la cara. Esa cara feliz que tantas alegrías ha reflejado. Pero ahora solo expresa tristeza. Está cansada de mentiras. Cansada del mundo en general. Intenta ser feliz pero no lo consigue. Demasiados obstáculos están apareciendo en su camino. Su cara lo expresa todo. Sus ojos, lo expresan aún más. Esos ojos verdes parecen apagados, sin ganas de seguir. Daño. Cada vez siente más daño. Y ella intenta solucionar las cosas, pero no lo consigue. Piensa que el mundo está en contra de ella. Y, tal vez, sea así. Está cansada. Cansada de luchar por cosas que cada vez tienen menos sentido. Solo quiere ser feliz. Quiere y lo necesita, cada vez más. No quiere llorar más. Pero sigue y sigue porque no hay remedio. Lo intenta cada vez más. Ella intenta ser feliz. Pero no lo consigue. Y espero que algún día lo consiga.